DEAD HAMLET CIERRA WASQHA

8 de noviembre de 2017

“Dead Hamlet”, broche de oro del Wasqha 2017

A esta puesta en escena de Sennsa Teatro, nspirada en el Hamlet de Shakespeare, le precedieron el Taller de Juegos para niños de Ana Soler y la proyección del documental "Demain"

La última jornada del Festival de Arte Emergente de Almedinilla se abría ayer domingo a las once de la mañana con el Taller de Juegos para niños impartido por la psicóloga Ana Soler en el que más de medio centenar de niños jugaron y manipularon muchos de los juegos que usamos hoy día, conociendo su procedencia y experimentando con algunos más modernos e ir descubriendo las habilidades para pasar un rato entretenido con los amigos y familia.

A la misma hora, también se proyectaba en el Teatro de la Casa de la Cultura el documental “Demain”, una película que incita a cambiar el mundo hoy y que da una serie de recetas e iniciativas para combatir el cambio climático. Tras la publicación de un estudio en 2016 que anunciaba la posible desaparición de parte de la humanidad de aquí a 2100, Cyril Dion y Mélanie Laurent se propusieron, junto a un equipo de cuatro personas, iniciar su propia investigación en diez países para averiguar qué podría estar provocando tal catástrofe y, sobre todo, cómo se podría evitar. Durante su viaje conocieron a pioneros que estaban reinventando la agricultura, la energía, la economía, la democracia y la educación y que estaban poniendo en práctica estas iniciativas, concretas, positivas y que ya están en marcha en algunos lugares y demostrando que funcionan.  Tras esta experiencia, los directores del documental más visto en Francia comenzaron a darse cuenta cómo podría ser el mundo del mañana, dónde lo humano y la tierra van siempre de la mano y dónde debe imperar la creatividad y el bien común.

Y el broche de oro del festival lo puso la compañía de teatro sevillana Sennsa Teatro, dirigida por J.M. Mudarra, con la obra “Dead Hamlet”, una versión libre de teatro físico y danza expresiva inspirada en Hamlet de Shakespeare.

El público asistente y amante del teatro disfrutó anoche de una obra mítica que representa al teatro del mundo, y que plasma valores eternos del hombre a partir del lenguaje escénico propio de la compañía que realizó un trabajo físico creativo de investigación y un concepto biomecánico de la escenificación: sentido rítmico y coreográfico de las acciones, musicalidad de la voz y los cuerpos, puesta en escena poética, gran potencia energética, uso del canto y la danza, además de la interpretación.

Y todo ello, por medio del simbolismo escénico y de una escenografía minimalista que le confiere al texto y a las acciones un protagonismo absoluto a Hamlet que campa a sus anchas por los espacios construidos de manera imaginativa con los elementos escenográficos.

 

 

Manuel Carrillo Castillo